Llevo un buen tiempo dándole vueltas al asunto. Repasando y meditando sobre los estereotipos de "viejita buena" vs. "viejita mala"
La primera, casi siempre tiene el pelo atado en un prolijo rodete, lleva lentes, siempre esta sonriendo y horneando tortas, y disfruta de leer cuentos a cuanto niño quiera oírlo.
La segunda, tiene el ceño siempre fruncido, es huraña, quejosa, esta rodeada de gatos y siempre anda con una escoba cerca.
¿Te suena?