De algún modo nos volvimos más atentos.... y cosas que hace un tiempo se nos escapaban del radar, hoy nos llaman la atención
Como el vecino que se sienta en una esquina, con su andador, y pasa largos ratos allí, mirando la gente, los autos, y saluda cordialmente a cada uno de los que al pasar, se animan a mirarlo a los ojos.
-Má, ahí esta el señor, otra vez,,, Saludemoslo-
-Buen día- le dije
-Buen día, señora - me respondió
Avanzo dos pasos y lo miro a Juan como para decirle... ¿no lo ibas a saludar? pero antes de que abra la boca, me gana de mano, sonríe con una sonrisa amplia y medio hueca producto del recambio de sus caninos y me dice:
-Se puso contento el señor -
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